INDICE
El té de jengibre es completamente delicioso, y se puede tomar no sólo por el gusto. Sino también por el hecho de todos los beneficios que le aporta a la salud física de las personas.
Sigue leyendo para que sepas más sobre esta raíz mágica, sus beneficios, y una receta que te dejará queriendo más.
¿Qué es el jengibre?
El jengibre, para algunos es conocido como “quion”, o “kion”, no es más que una planta aromática que ha estado en el ojo de los naturistas por muchos siglos, y es que esta posee múltiples efectos beneficiosos para la salud, y empleables en el área curativa.
Es nativo de la familia de los tubérculos, y se trata de una raíz (rizoma subterráneo). El sabor es fácil de distinguir, por ser picante. Y esto es algo que también lo ha colocado como uno de los mejores condimentos de la gastronomía.
En los países árabes, China, La India, y en otros lugares de gran importancia en el Oriente se trató como una de las plantas más populares. Generalmente porque tiene muchas propiedades antiinflamatorias, pero que también se puede aprovechar para combatir alguna que otra enfermedad de la que hablaremos más adelante.
Una de las formas más sencillas de consumirlo es mediante el té, pero debes saber que existe una gran variante de este. Debido a que, en cada parte del mundo, se le ha añadido un elemento característico para hacerlo un poco más propio de lo que ya debería ser.
Beneficios del té de jengibre
Hablaremos un poco de cómo nos podemos beneficiar gracias a las propiedades del té de jengibre.
Las ventajas que sacamos de su consumo son demasiadas, por lo que las resumiremos a las principales, o las razones por las cuales este es consumido a menudo. ¡Es una raíz mágica!
Ayuda con las nauseas
Uno de los beneficios del té de jengibre durante el embarazo es que se puede utilizar como un antiemético natural, en especial durante esos primeros meses.
Donde se le puede sacar mucho provecho tato para el feto como para la madre. De igual manera, controlará efectos para pacientes de quimioterapia.
Digestivos
Para aquellas personas que sufren de problemas digestivos, tal como es el caso de diarreas, flatulencias, gastritis, u otros, se recomiendo mucho el consumo del jengibre.
De igual manera, es un gran protector estomacal, pero no se recomienda como un sustitutivo a la medicina que se crea para ello.
Antiinflamatorio natural
Las propiedades del jengibre lo hacen ideal para ayudar a aquellas personas que atraviesan enfermedades inflamatorias, o dolorosas, a tener un mejor momento.
De igual forma, combate con eficacia problemas relacionados con la fatiga crónica, la artritis, y también la artrosis. Considerada como una raíz mágica.
Afecciones en la garganta
La realidad es que los más grandes aficionados a esta raíz son los cantantes. Y es que este aporta un gran beneficio dentro de lo que es la trata de las infecciones e inflamaciones que ocurren en la garganta. Muchos toman este té a diario por ello.
Ayuda a mantener el calor corporal
Existen personas que tienen problemas para mantener la temperatura corporal, o que son muy friolentas.
Para ellas, el té de jengibre puede ser de gran ayuda. En especial si se toma durante el invierno. El componente calorífico que posee es muy potente.
Acelera el metabolismo
Una gran parte de las personas siempre se mantienen en la búsqueda de eso que les haga perder los kilos de más.
Por suerte para ellos, los beneficios del té de jengibre también se extienden a lo que es el metabolismo, ya que lo acelera. Tomarlo puede ser la ayuda que necesitas.
¿Cómo hacer el té de jengibre?
Preparar té de jengibre es más sencillo de lo que imaginas, pero la verdad es que muy pocos saben hacerlo que quede con un gusto profesional, donde se puedan aprovechar todos los beneficios que este tiene para darnos. Los ingredientes que necesitarás son:
- 1 cucharada de jengibre rallado.
- 1 taza de agua.
- 1, o 2, cucharadas pequeñas de miel (este es un ingrediente opcional).
- Un chorro de limón (este es otro ingrediente que se usa de manera opcional).
Ten en cuenta que las cantidades estipuladas son suficientes para una sola taza. Si necesitas más, entonces tendrás que duplicarlas.
Preparación del té de jengibre
- En caso de que hallas comprado la raíz de jengibre entera, tendrás que prepararla. Es decir, rallarla.
- Coloca a hervir el agua, suficiente para cuantas tazas necesitas. Para no desperdiciarla puedes medir las tazas antes de colocarlas al fuego.
- Una vez que el agua hirviera, colócala en la taza y añade la cucharada de jengibre rallado.
- Para un té de jengibre normal, tendrás que dejarlo reposando por unos 10 minutos. Si lo que quieres es un resultado más intenso, entonces añádele otra cucharada del ingrediente principal, o déjalo reposando por 20 minutos.
- Para que quites los restos de jengibre, vuelca todo en un colador.
- En caso de que así lo prefieras. Una vez lo tengas en la taza, listo para el consumo, podrás añadirle la miel y el chorro de limón al gusto.
Te recordamos que el té de jengibre puede que, en la primera pasada, no sea el que más te guste. Pero tiene mucho que ver con encontrar la combinación perfecta para que halles el punto en el que lo disfrutas. Por lo que no temas probarlo más cargado, o más simple.
Contraindicaciones del té de jengibre
Entre las principales contraindicaciones del té de jengibre es que este es capaz de bloquear los canales de calcio para aquellas personas de avanzada edad que están en tratamiento para la hipertensión.
Lo que les genera una fuerte caída de su presión arterial.
Tampoco se recomienda en las personas que desarrollan cálculos renales, porque aumenta la capacidad de producir bilis.
Si se toma medicamentos de por vida se debe estar muy al tanto de si son compatibles o no, porque la raíz es tan fuerte que afecta cómo funcionan ciertos fármacos.
En especial si tratan enfermedades del corazón, o renales.